Los Porsche 944 y 968 supusieron un enorme salto frente al Porsche 924, una evolución racional de un concepto mucho más eficaz y moderno que el del 911. Así son sus claves.
Aunque nació como un proyecto para Volkswagen, el Porsche 924 no tiene un origen más bastardo que el que en su día pudieron tener los Porsche 356 y sin embargo nadie duda que este último sea un Porsche legítimo. La realidad es que el concepto iniciado con los 924 (o mejor, dicho, con los 928, pues su concepción se inició antes que la del 924) es 100% Porsche y las sucesivas evoluciones que se muestran en esta vídeo prueba materializadas en los 944 y 968 fueron afianzando todavía más esa raza de marca.
Menospreciados por muchos aficionados, lo cierto es que esta saga de modelos ofrece todo lo que uno busca de un coche deportivo, con una imagen llamativa, una buena postura de conducción, unas sensaciones al volante estimulantes y y un buen comportamiento dinámico. En cuanto a prestaciones, es cierto que las versiones de apenas 125 CV de los 924 pueden parecernos pocos, pero estaban en la línea de modelos más o menos de la época como los Alfa Romeo GTV 2000 y nadie duda de su deportividad, y las sucesivas escaladas de potencia hasta llegar a los 250 CV de las versiones Turbo S del Porsche 944 o los sensacionales 240 CV del 968 son cifras ya más que respetables.
Aquí tienes el vídeo con la historia detrás de estos modelos y los datos para que puedas comparar y ver la evolución que existe entre ambos.
Hugo
Rubén Fidalgo