
El VW Karmann Ghia fue un verdadero cordero con piel de lobo. Su silueta de elegante deportivo vestía la mecánica de un Escarabajo, con unas prestaciones muy modestas que no casaban demasiado con su aspecto.
Su calidad de fabricación, su precioso traje hecho a medida por Ghia y cosido por Karmann y su fiabilidad hacen que el interés por este coche perdure en el tiempo.
Aquí te cuento su historia y su prueba.