Los coches ya no apasionan
Ya es un hecho constatado que los adolescentes, los futuros compradores, tienen mucho más interés en la última manzana con cámara que en el auto de papá; los coches ya no apasionan. Lo más triste de todo es que confieso que yo mismo, enamorado de este artilugio desde que tengo uso de razón, ni siento…